Siempre he tenido un gran interés en viajar, conocer y aprender sobre países y culturas
diferentes. Después de vivir tantos años en España, estaba buscando un cambio de aires
que pudiera abrirme puertas y ofrecer nuevos desafíos para seguir creciendo tanto
académicamente como a nivel personal. Es por ello por lo que al tener la oportunidad de
formar parte del programa Erasmus + , decidí viajar a Alemania acompañada de mis dos
compañeros Francisca y David.
La ciudad a la que nos dirigimos fue Bad Kissingen, ubicada en el estado de Baviera, y la
empresa que nos acogió para realizar las prácticas fue Park Hotel Cup Vitalis, un hotel de 4
estrellas localizado en el centro de la ciudad y en el que se encuentran trabajando
actualmente cuatro antiguos alumnos del instituto que también han realizado el programa
Erasmus + en años anteriores. Formar parte de este viaje ha sido un primer paso para
aprender y adquirir experiencia en el mundo del turismo, así como un mayor entendimiento
sobre la industria hotelera.
La gran mayoría de trabajadores en nuestro sector son jóvenes, lo que nos permitió
conectar con ellos con mayor facilidad. Prácticamente todos son extranjeros, a excepción de
algunos alemanes, por lo que tuvimos que utilizar bastante el inglés. A pesar de las
diferencias culturales, siempre encontramos cosas en común que nos unen y enriquecen
aún más, aunque también teníamos por lo menos seis compañeros españoles que estaban
dispuestos a ayudarnos y enseñarnos en todo momento. Sin embargo, esto nos dificultó un
poco el proceso de aprender alemán, pero vamos comprendiendo más cada día debido a
escuchar e intentar hablar con los clientes, aún así, con un poco más de tiempo iremos
mejorando.
En lo que a la ciudad se refiere, es pequeña y acogedora. Combina perfectamente su parte
urbana, que cuenta con varios edificios típicos alemanes que se encuentran en perfectas
condiciones, con numerosas tiendas, restaurantes y bares, además de una bolera, y la
naturaleza, ya que está rodeada de bosques en los que se pueden realizar actividades
como el senderismo o ciclismo y observar diversos animales como por ejemplo ardillas,
ciervos, zorros, pájaros, etcétera. Es bastante tranquila, por lo que se puede salir a
cualquier hora sin ninguna preocupación. Además tiene una estación de trenes a la que se
puede llegar en pocos minutos andando y que conecta con otras ciudades en toda
Alemania. Durante las prácticas hemos tenido la oportunidad de visitar lugares como
Würzburg, Schweinfurt, Múnich, Berlín, Frankfurt, Bamberg, Hamburgo, Nuremberg…
Sin lugar a dudas, Erasmus + nos ha dado una oportunidad única que nunca olvidaremos y
considero que es algo que todo estudiante debería experimentar para crecer, tener una
mayor visión de futuro y valorar cada momento.
Yasmin Leite Dos Santos
Estudiante de Guía, información y asistencias turísticas.
