Experiencia sobre mis prácticas de erasmus en Holanda

Para comenzar, me presento. Soy Franco, alumno del instituto María Zambrano de 2º de GAT. Tengo 24 años y procederé a contar un poco mi experiencia con las prácticas de mi grado superior.

Uno de los mayores alicientes a la hora de apuntarme a este curso fue la posibilidad de hacer las prácticas fuera de España. Una vez llegada la pandemia, todo se complicó. Aun así, algunos fuimos capaces de encontrar un sitio para realizar las prácticas. En mi caso fue en Róterdam, Holanda.

Cuando llegué al hostal me sentía con muchas ganas de empezar y de poder demostrarme de lo que soy capaz. Los primeros días fueron los más duros. Fue muy violento el cambio de estar con tu rutina diaria en casa, junto con mi familia, amigos, club, etc. Me sentía muy solo. Acababa mis turnos de trabajo y luego me sentía vacío. Eso fue las primeras semanas. Al principio, como es normal, no me tenían tanta confianza y estaban siempre detrás mía. Poco a poco me fui ganando la confianza de mis jefas y compañeros.  Desde hace un mes aproximadamente me dieron una copia de la llave maestra del hostel, y soy el que abre por las mañanas y pone todo a funcionar, me parece que me acabé ganando la confianza.

Mis prácticas consisten en formar parte del staff del hostel. Nadie tiene ninguna función en concreto, todos hacen de todo. Recepción, bar, housekeeping, limpieza de baños, mantenimiento, etc. Incluso las dueñas. Es un sistema que han puesto en funcionamiento mientras dure la situación de la pandemia. Antes si había departamentos diferenciados. Ahora mismo la situación no da para más. El año pasado sobre estas fechas siempre había entre 60/70 huéspedes por día, actualmente no llegan a los 15. Al menos es uno de los pocos hostels abiertos en Róterdam.

Personalmente me ha gustado bastante poder realizar mis prácticas aquí. He aprendido mucho, desde atender clientes en recepción, poner buenos cafés, desayunos, hacer bien las camas, etc. Siento que he crecido un montón, incluso ahora estos últimos días cojo el teléfono. También he de recalcar que mis compañeros han ayudado mucho a tener un buen clima de trabajo y a mis jefas por ser comprensibles y amables conmigo. Siempre que he pedido algún cambio de turno o cuando dije que prefería trabajar por las mañanas me han dado luz verde.

Para mí, el mayor punto negativo de esta aventura fue el tener que compartir habitación, baños y cocina con otras personas. Es bastante incómodo no tener tu propia privacidad, tu espacio para estar tranquilo. Por lo menos, diría que la mitad de mis prácticas he estado solo en mi habitación, por suerte. Ahora que estoy a 4 días de irme ya no me perturba tanto como los primeros días, pero aun así no logro acostumbrarme.

En mi conclusión final me gustaría dejar patente que es una experiencia que hay que vivir, creces un montón como persona y te ayuda a saber de lo que eres capaz. He podido mejorar un montón mi inglés, por aquí nadie habla español. También me ayudó mucho que haya venido una compañera de clase a una ciudad cercana a la mía a realizar sus prácticas. Resultó un gran apoyo en momentos difíciles.

Compartir en redes sociales
Entradas creadas 1

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Publicaciones relacionadas

Comienza escribiendo tu búsqueda y pulsa enter para buscar. Presiona ESC para cancelar.

Volver arriba